Os voy a contar una pequeña historia basada en hechos reales. Tan sólo cambiaré los nombres de sus protagonistas para no molestar, si es que puede haber molestias en un caso como éste.
Eran dos amigas muy íntimas Lidia y Claudia, inseparables desde que eran pequeñitas. Allá donde iba una, iba la otra. Sus ideas y pensamientos coincidían al cien por cien. Uña y carne. Hasta sus emociones se regían por los mismos patrones.
Hace unos meses, Claudia tuvo unas pequeñas molestias típicas del curso de una artrosis y que mejoraban con la medicación que le prescribía su médico. Eran pequeños episodios de dolor que remitían pronto.
Lidia, poco tiempo después de manifestarse las molestias de su amiga empezó a sentir alteraciones en su aparato digestivo que aludían a la acumulación de estrés por el trabajo. Sin embargo, la situación empeoró y fue necesaria la atención por parte de un especialista, el cual, despùés de haberle realizado las pruebas correspondientes, terminó diagnosticando un cáncer en estado muy avanzado. Tres meses después, fallecía.
¿ Qué pasó a partir de ese momento?...La respuesta, de base psicosomática hizo su aparición en Caludia y sus molestias empezaron a hacerse más manifiestas y frecuentes empezando a invadir otros territorios de su cuerpo. El sistema inmunológico de Claudia inició su campaña de reinado, llegando la situación a un nivel en el que se tuvo que recurrir a la búsqueda de un especialista en enfermedades raras , ya que , el médico de cabecera veía que el cuadro se escapaba de sus manos.
Se diagnostica una sarcoidosis en un principio, posteriormente se cambia de diagnóstico por una vasculitis ( ambas enfermedades son de etiología desconocida , muy poco frecuentes y donde tiene mucho que ver el sistema inmunológico). Tras el ingreso en una clínica de Barcelona y después de innumerables pruebas se llega a un diagnóstico final. Se trata de un síndrome hematofágico, las células se comen a las células en una batalla imparable. El origen no se conoce y la situación empeora por momentos. Las defensas de Claudia se debilitan rápidamente.La afonía, la debilidad, la fiebre, las úlceras diseminadas por todo el cuerpo van ganado la batalla y la desesperación en la legión de especialistas que la trataban se hace patente. Sus recursos científicos se desmoronan.
Claudia había sido trasladada desde el Norte de Africa hasta Barcelona, donde se desató toda la sintomatología, pero el aspecto psicosomático parece que se pasó por alto y no había ningún psicólogo en el cuadro de médicos que la trataban, lo cual pòdría haber solucionado algunos aspectos. ¡Quien sabe!.Todo se trató desde un punto de vista orgánico sin tener en cuenta la posible etiología psicosomática como detonante y en posible respuesta al fallecimiento de Lidia. El probable final mortal , no fué descartado.
¿ Qué pasó desde entonces?, ¿ tuvo Dios algo que ver en su salvación?...¿ o fué la pericia médica la que salvó a Claudia de una muerte anunciada?. Su hermano fué avisado de que estaba ingresada casi un mes después y tras haber expresado su enojo al enterarse, se interesó vivamente por su estado y por la evolución del cuadro. Era médico y entendió las pocas posibilidades de un final feliz tras haberse puesto en contacto con los especialistas que la trataban en Barcelona.Era muy devoto de la Virgen de Medjiugore ( Croacia). Esta Virgen se apareció a unos niños no hace muchos años y existe documentación reveladora y positiva sobre su autenticidad. La Iglesia no dice que no.
Amparándose en su fé, rezó y pidió por su hermana anteponiendo la promesa de que irían los dos a visitarla al lejano pueblo de Croacia si en quince días la mejoría permitiera incorporarse a su hermana a la vida normal y con mejoría significativa fuera de todo peligro. Fué a verla al Hospital y le contó la promesa que había hecho. Su hermana le respondió que sí, que iría con él si salía de aquella agonía.
Quince días después y tras haber encontrado los médicos un fármaco - de esos que tan sólo se utilizan en Estados Unidos y en contadas ocasiones- la situación de Claudia empezó a mejorar de tal forma que le dieron el alta y la derivaron a su domicilio, donde se adapta de nuevo a su vida con su marido, sus hijas y su nieto. Ahora tienen que cumplir la promesa y así lo harán gustosos.
Los ateos dirán que fué la Ciencia. Otros dirán que fué suerte o casualidad ¿ Porqué no se pìensa que pudo ser la fuerza de la oración y la fé?.
No es mi intención imponer ideas, ni hacer apología de la fé. Eso no es necesario, ya que, con ella se han ganado las grandes batallas e la Vida. Lo que sí intento transmitir, es que, cuando veas que todo se te hunde, cuando no encuentres tabla de salvación, olvida esa adicción a tu egocentrismo y dale una oportunidad a la fé. Sólo tienes que decir y sentir..." yo creo, ayúdame". Quedarás maravillado aunque por éllo tendrás que pagar toda una vida de equivocación.
